27 jun 2013

La ley del Espejo



Esta semana me han hecho un regalo que hoy quiero compartir con todos. Ha caído en mis manos este relato, una joya y un regalo que creo que podría ser el libro de cabecera de muchas personas, todas aquellas que deseen descubrir el funcionamiento de las cosas, de cara a alcanzar la paz interior y la felicidad. 

Es un pequeño relato que nos habla a cerca de la importancia del "perdón" en nuestras vidas, y como este (aparentemente) simple acto, puede cambiar el discurrir de las mismas. El perdón, la capacidad de agradecer, y como «La vida es un espejo que refleja nuestro corazón.» Es decir que «ocurren acontecimientos que sintonizan exactamente con nuestro interior». O también se puede decir que «la causa que se halla en nuestro interior se hace realidad como efecto».

Todas las palabras de el mundo que a mi se me ocurrieran, nunca llegarían a trasmitir lo que el autor con las suyas, asi es que aquí os dejo algunas de sus ideas, y el enlace para que podáis leer el relato completo y disfrutar de él. Espero que os guste tanto como me ha gustado a mi...pero sobre todo, que os remueva un poquito por dentro y os haga pasar de el estado de sopor...a la acción. Porque eso significará que más personas estarán en el camino de obtener ...LA PAZ.

Ana B.


"Al igual que cuando nos miramos en un espejo podemos conocer nuestra propia imagen, si miramos lo que nos pasa en la vida podremos conocer qué tenemos dentro del corazón. ¿Qué hace usted cuando no le gusta su imagen reflejada en el espejo? Por ejemplo, si se mira en el espejo y ve que está despeinado/a, 

¿qué hace?

Por mucho que extienda la mano para arreglar los cabellos de su imagen en el espejo, ¿verdad que no lo conseguirá? Probablemente lo que hará será extender la mano hacia su cabeza y los arreglará.
De forma parecida, para resolver de raíz los problemas de la vida hace falta eliminar la causa que se halla en el propio corazón. Si no cambiamos nuestro interior, y únicamente esperamos que cambien los otros y las situaciones, no conseguiremos lo que deseamos.

Cuando digo que «hace falta cambiar nuestro interior» no quiero decir que «no haga falta actuar en la realidad».

Por ejemplo, si alguien está siendo maltratado por otro, lo primero que se tiene que hacer es actuar para protegerse en la vida real. Pero, al mismo tiempo que se intenta hacer lo mejor posible en la vida real, es también importante ir cambiando lo que se tiene dentro del corazón.

Con el perdón se consigue la calma. Vamos a reflexionar un poco sobre el «perdón ». Cuando pienso «No se lo puedo perdonar » significa que todavía vivo atado al pasado, que el corazón está repleto de rencor hacia alguna persona. 

Si siento resentimiento hacia alguien y me digo que “¡no se lo puedo perdonar!”, no conseguiré nunca la paz interior. Estamos trastornados porque una fuerza extra está actuando sobre nosotros. Y si esta situación se prolonga se acabará convirtiendo en sufrimiento.

Ciertamente esto es una situación difícil. Yo también la he experimentado. En este momento, nosotros tenemos dos opciones: «perdonar» o «no perdonar»

Si en el pasado resultamos heridos de la relación con alguien, podemos escoger «no perdonar». En este caso significa que nos permitimos quedar anclados en el acontecimiento pasado. Y debido a esa situación pasada eliminamos la posibilidad de tener una vida llena de paz.

Por otro lado, tenemos también la opción de «perdonar». Si perdonamos, entonces tanto nuestro cuerpo como nuestro interior se calman y podemos relajarnos.

Nos liberamos del hechizo del pasado, y conseguimos paz y libertad de espíritu.

«Perdonar» no significa que damos el visto bueno a lo que nos han hecho, ni que lo pasamos por alto. Tampoco significa que tengamos paciencia a pesar de pensar que «él/ella tiene la culpa». «Perdonar» significa que nos liberamos del pasado que nos ata, que dejamos de hacer reproches, y que escogemos la calma de los momentos presentes.

¿Y usted? ¿Siente en este momento resentimiento hacia alguien? ¿Estaría dispuesto a perdonar a esa persona con tal de conseguir una vida feliz para usted?

Debe tener en cuenta que perdonar a alguien es sólo para usted mismo/a. No es para nadie más. Perdonémonos a nosotros mismos.
Probablemente haya quien piensa: «Me es imposible perdonar a tal persona».
En este caso, no se culpe, ni piense: «Soy un desastre porque no puedo perdonarle» o «Así no podré ser feliz », etc. Tiene que comprender que le han herido, y antes será necesario que lo acepte. Quizá todavía no esté preparado/a. Es necesario que se acepte a sí mismo/a.

Primero uno se perdona a sí mismo. Esto es lo que en psicología se conoce como autoaceptación. Primero aceptamos que nos han herido, y después nos autoperdonamos por no poder perdonar a tal persona. De este modo, conseguimos autoaceptarnos, y conseguimos el alivio que nos posibilitará perdonar.

                                                            LA LEY DEL ESPEJO

Yoshinori noguchi